El arte de contar historias es milenario. Desde pequeños nos encantaba que nuestra familia, maestros, nos explicaran cómo habían llegado a ser ellos mismos, de dónde venían y sacar una pequeña moraleja de todo ello para aportar una pizquita de eso a nuestra historia de vida.

Ahora, el storytelling (que no es ni más ni menos que contar historias) se ha venido aplicando al marketing y a la forma en la cual se nos venden hoy en día las cosas. Ya no nos interesa tanto qué beneficios conseguiremos con lo que compramos (que también) sino más la persona o entidad que está detrás. Si es ética, si nos podemos identificar con alguna de las tareas que realiza, si alguien de nuestro entorno la conoce…

Las historias aplicadas a nuestra marca personal, a la huella profesional que plasmamos en los demás, se transforman en una bomba emocional que conecta con la empatía y hace que se nos recuerde por aquello que fuimos, somos y seremos.

Crear esa atmósfera mágica que llegue a conectar con nuestros lectores, oyentes o espectadores es vital. De esta forma lograremos transmitir más confianza ya que nos acercamos al lado más humano y cercano, que toca la fibra sensible de cualquiera.

A su vez, también conseguimos diferenciarnos de los demás y más concretamente de nuestra competencia puesto que todos transmitimos de manera distinta y cada uno tiene una manera de contar las historias. Porque sobretodo el storytelling se basa en el cómo cuentas tu historia y la pasión y entusiasmo que emitimos.

Y es que las historias personales hacen que nos translademos a nuestra infancia. Sumergir a tus lectores en «tu carta de vida» conseguirá que te vean como un igual y a la vez les motivará para llegar a donde tú has llegado gracias a tu empeño y constancia.

Un claro ejemplo del storytelling aplicado a las marcas personales lo hemos visto en La Pausita del Té, el espacio de entrevistas en podcast donde he tenido el placer de conectar con grandes profesionales del coaching, emprendimiento y creativos que a través de la magia de «la radio» nos han hecho llegar sus historias personales y profesionales fundidas en una sola y que sin duda animan a seguir adelante a alcanzar nuestros propósitos vitales. Aprovecho de paso para contarte que las entrevistas continuarán la próxima temporada de septiembre-octubre con muchos más bloggers, youtubers y emprendedores que potencian su marca personal online 😉

Y bien, ¿Cómo y dónde puedes transmitir tu historia?

Muy sencillo, el valor del storytelling está en incorporarlo en tu trabajo a través de las redes sociales, los emails que envías a tus clientes o potenciales, las newsletters que escribes cada semana (dales un toque que se identifique con tu forma de ser), el logo con el que firmas en tu blog, canal y hasta las facturas; el diseño de tu web, etc.

Es decir, todo cuanto crees tú misma/o tiene que estar impregnado de tu aura personal, por así decirlo. La escritura, el tono de voz, la manera de expresarte en videos, tu forma de explicar en una conferencia o charla en la que participes son identificadores que ayudan a que los demás sepan quién eres, cómo has conseguido llegar a dónde estás y hacia donde quieres dirigirte.

Como ya sabrás, yo soy una firme defensora de los videos y su poder para conectar personas. A través de un video puedes contar, de la forma más simple, llana y cercana quién eres, lo que te gusta hacer y en qué eres bueno. En definitiva, demostrar de lo que eres capaz. Además, si añades esos videos dentro de tu blog, las personas que te lean se quedarán más tiempo dentro de tu web y eso hará que la retención de tu audiencia aumente.

Un buen sitio donde incorporar videos es en la home page (página de inicio) ya que es donde comienzan a llegar tus visitantes y en el «Sobre mí», porque si acuden a leer sobre ti, ¡Qué menos que presentarte a ellos cara a cara! 😀

Así, contando tu historia personal y profesional ¡Te diferenciarás al momento!

La clave está en servirte de la creatividad, inspiración, ingenio y originalidad para darle tu toque especial y característico.

¿Te animas a contarme quién eres?

Me encantará leer tu historia en los comentarios o que me escribas tu «Sobre mi» o tu blog para conocerte más todavía.